VALLADOLID

Cerrar

VALLADOLID

LA DESPENSA VALLISOLETANA

Uno de los secretos de la rica y variada gastronomía vallisoletana está en sus productos. La materia prima es esencial ya sea para la elaboración del plato más tradicional o la tapa más vanguardista.

Para que las gastronomía de Valladolid haya traspasado fronteras ha jugado un papel fundamental la calidad de los productos de estas tierras castellanas. Sin duda, uno de los más conocidos es el lechazo que asado al horno de leña se convierte en uno de los platos más tradicionales  de esta tierra.

Valladolid tiene además una larga tradición en el cultivo de frutas y hortalizas de primera calidad . Es el caso del espárrago blanco ecológico, producto que llegó a enamorar al propio  Ferrán Adriá; o el cardo rojo, un superalimento que ha dado el salto a la cocina gourmet y que se puede disfrutar salteado con unos ajos, rebozado o como plato principal acompañado de piñones,  también muy típicos de Valladolid.

Los quesos, por otro lado, mantienen el respeto por las tradiciones ofreciendo además una amplia variedad dentro de la provincia; lo mismo que ocurre con el Pan  de Valladolid, que cuenta con una Marca de Garantía propia y productos destacados como el lechuguino, el cuatro canteros o la fabiola.

La despensa se completa con la calidad de los aceites de oliva virgen extra, sin olvidarnos de la variedad de repostería que ofrece la capital del Pisuerga.

Espárrago blanco ecológico. Fresco o en conserva es uno de los tesoros de la huerta vallisoletana.

Valladolid cuenta con almazaras donde se produce aceite de oliva virgen extra de excelente calidad elaborado de las variedades manzanilla cacereña, picual o arbequina.

Mantecados, ciegas o cocadas son algunas de las delicias de la repostería vallisoletana que mantiene su fabricaciones con recetas artesanales y productos de primera calidad.

El piñón de Valladolid destaca por su sabor natural en el que se percibe el aroma a pinar y resina, junto con su color blanco y textura equilibrada; además de ser un producto con un alto valor nutricional.

El lechazo asado al horno de leña es el buque insignia de la cocina de Valladolid. Se trata de un cordero lechal que puesto en mano de los Maestros Asadores se convierte en un plato único.

El Pan de Valladolid cuenta con una Marca de Garantía propia. Es muy conocido por ejemplo el pan lechuguino que se caracteriza por su corteza dorada, fina y crujiente y su miga blanca de textura uniforme.

El cardo rojo cultivado en Valladolid se ha convertido en todo un producto gourmet. Se consumen sus pencas y su corazón ofreciendo amplias posibilidades culinarias.

Valladolid ofrece una amplia variedad de quesos artesanales entre los que destacan los realizados con leche de oveja

VALLADOLID